Un perro de casa duerme durante tres cuartas partes del día. Por eso, su cama es un lugar especial para él.
Una buena cama debe tener las siguientes características:
Debe ser suficientemente grande para que quepa por completo.
Debe ser cómoda, mullida y calientita.
Debe poder lavarse para evitar la aparición de pulgas y malos olores.
Debe estar ubicada en un lugar donde llegue algo de sol y lejos de la humedad.
Una buena idea para los primeros meses del cachorrito es que pongas en su cama alguna prenda vieja tuya, como un saco o una camiseta, para que reconozca tu olor y se sienta acompañado.
Recuerda de vez en cuando airear las cobijas del perro para que no tomen mal olor, y si lo prefieres puedes utilizar productos especiales para mantener la cama fresca y sin parásitos.
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